La alemana BMW, que ha renovado casi toda la gama todocamino, ya muestra la cuarta generación del BMW X5, el modelo que nació al mundo en 1999, por lo que casi dos décadas después del lanzamiento del primer X5, el SUV alemán se lo ve grande que nunca, ya que crece en sus medidas, para alcanzar 4920 mm, de largo; 2000, de ancho; 1740, de alto, y una distancia entre ejes 40 mm más larga.
La marca asegura que hay más espacio para los pasajeros, sobre todo para los que vallan detrás, y un baúl, al que se accede a través de un portón de dos secciones, que crece hasta los 645 litros, aunque puede llegar a más de 1800 litros, con los respaldos de los asientos posteriores abatidos.
En el diseño, muestra una imagen más deportiva, con una enorme parrilla delantera con los característicos dos riñones de la marca muy cerca de los faros con tecnología LED, que podrán elegirse de láser adaptativos; una marcada línea lateral que desemboca en los faroos traseros tridimensionales, de tipo LED. Como viene siendo habitual, las variantes xLine y M Sport lucirán detalles estéticos específicos y podrán contar con llantas de hasta 22 pulgadas.
Motores
La oferta mecánica estará compuesta, inicialmente en Europa, por tres motores de 6 cilindros en línea. La versión de acceso vendrá dada por el diésel xDrive30d, que tendrá 265 CV y un par máximo de 620 Nm. Por encima, encontraremos el naftero xDrive40i, con 340 CV un par máximo de 450 Nm, y el tope de gama será el M50d que, gracias a 4 turbocompresores, entregará 400 CV y un par máximo de 760 Nm. Todos ellos estarán asociados a una caja de cambios automática Steptronic de 8 velocidades, se combinará con la tracción total.
Interior
En el interior, la disposición de los mandos y el diseño destaca la consola central orientada hacia el conductor, una pantalla táctil de 12,3" ubicada en el centro del panel frontal y el característico mando iDrive situado a pocos centímetros de la palanca de cambios. Para el cuadro de mandos, se ha elegido la nueva instrumentación digital personalizable, denominada Live Cockpit Professional, mientras que el Head Up Display proyecta gráficos en 3D sobre una superficie más grande.
En cuestión de calidad y terminaciones, también da un paso adelante y prácticamente todos los materiales empleados son de madera, aluminio y cuero. No falta la iluminación ambiental a través de LED, aunque lo más destacado es el equipo de sonido envolvente de Bower & Wilkins. En el equipamiento incluye los elementos habituales de este segmento, como los asientos con ajustes eléctricos y climatización, el techo panorámico, los posavasos refrigerados y calefaccionados o el sistema profesional de entretenimiento para el asiento trasero, con pantalla táctil de 10,2 pulgadas.
Tecnología
En el plano técnico, hay novedades importantes, como la suspensión neumática de doble eje, la dirección activa integral y el paquete Off-Road, para mejorar las capacidades todoterreno. De serie, cuenta con amortiguadores controlados electrónicamente, aunque opcionalmente podrá montar la suspensión adaptativa M o la citada suspensión neumática de doble eje, con la que se podrá variar la altura de la carrocería hasta 80 mm. El eje posterior podrá ser direccional.
Cuenta con lo último en materia de asistencia a la conducción, incluyendo el control de crucero activo con función de parada y arranque automático, la alerta de cambio de carril o el Driving Assistant Professional, que asiste en la dirección y en la trayectoria. A través de la llave inteligente, el X5 podrá estacionar de forma automática bajo la supervisión del conductor y, de la misma forma, será capaz de abandonar la plaza de estacionamiento. Todavía no se han confirmado los precios, pero se estima que estarán entre los 59.000 a los 140.000 euros, según el modelo que se elija.
