Daniela Medina, Gerente del Centro de Comando y Control de Ituran Argentina, da a conocer una columna adelantándose al Día de las Infancias, explicando que es una gran oportunidad para reflexionar y difundir la importancia de la seguridad vial infantil y el cuidado de todos los ocupantes del vehículo en cada viaje, en especial de los niños y niñas. 
 
Autos particulares: Los cinturones de seguridad son un elemento básico en caso de un siniestro, pero no son funcionales en niños. Por lo tanto, la presencia de un asiento especial es necesaria para que todos los chicos se transporten seguros en cada viaje, por más corto que sea. El Sistema de Retención Infantil (SRI) son todas las sillitas y otros dispositivos de sujeción homologados que permiten transportar a los niños/as en el asiento trasero del vehículo reduciendo la tasa de mortalidad en infantes en un 70%. En todo el territorio argentino, los menores de diez años deben viajar sujetos al asiento trasero, con el SRI adecuado en relación con su peso y altura, según lo establece la Ley Nacional de Tránsito 24.449. (Cabe destacar que en la Ciudad de Buenos Aires, la obligatoriedad de Ley llega hasta los 12 años)
 
Moto: todos los acompañantes tienen que viajar atrás del conductor y con un casco apropiado colocado. Sin embargo, se hace hincapié en que el traslado de niños en motos implica un gran riesgo para su salud, porque tienen más probabilidades que los adultos de sufrir consecuencias severas ante un siniestro vial, ya que ni siquiera los adultos en posición de pasajeros pueden evitar desprenderse de la cintura del conductor ante una caída.  

 
Transporte público (colectivos, taxis, remises o autos de aplicaciones): En colectivo los menores deben subir primero, pero, por el contrario, al bajar, deben descender primero los adultos para poder sujetar al niño que baja del vehículo. Si hay asientos disponibles, tienen que sentarse lo más alejado de las puertas y, si no logran sentarse, deben viajar parados en el pasillo tomados de los pasamanos con ambas manos para ayudar a su equilibrio.
En el caso de viajar en un taxi, remís o auto de aplicación, deben tener siempre el cinturón de seguridad y ponerle traba a las puertas. A la hora del descenso, los niños deben bajar donde haya vereda.  
 
Bicicleta: La Ley Nacional de Tránsito establece una edad mínima de 12 años para conducir bicicletas en la vía pública y, hasta los 18 deberían hacerlo acompañado de un mayor. En la Ciudad de Buenos Aires, de acuerdo a la Ley 2.148, los menores de 12 años pueden circular por las bicisendas y por las veredas, a la menor velocidad posible y respetando siempre la prioridad del peatón.
La ANSV recomienda que el tamaño de la bicicleta sea adecuado al tamaño del niño, usar siempre el casco, no circular en contramano, respetar las señales de tránsito, enseñarles las señales que deben realizar para ser vistos por el resto de los conductores y, si se traslada a un menor como acompañante, llevarlo en las sillitas adecuadas por lo menos hasta los 6 años.

 
Niños peatones: Cuando se pasea con niños, se recomienda evitar cruzar cuando el semáforo está por cambiar y enseñarles en qué parte se debe esperar el cruce peatonal. Los menores siempre deben cruzar la calle sujetos a personas adultas y por los sitios destinados a tal fin. 
 
Además de prestar atención a los hábitos y conductas, recomendamos contar con un servicio como Ituran Emergencia que, además de permitir la localización y el rápido recupero del vehículo en todo el país en caso de robo, tiene como diferencial el hecho de que brinda asistencia al conductor y a los acompañantes las 24 horas del día, los 365 días del año ante un accidente, ante la detección automática de un choque de relevancia o el llamado del cliente, mediante el envío de policía, bomberos y ambulancias al lugar. Además, cuenta con una APP que le permite al conductor acceder a llamadas de emergencia.