El refinado Chevrolet Cruze, un vehículo de producción coreana, es uno de los autos más exitoso de la empresa del moño en el segmento de los medianos, donde tiene mucha competencia de todas las marcas de nuestro mercado. En esta oportunidad tuvimos la oportunidad de probar la versión de cinco puertas en la versión  LTZ, con caja automática, que además de ser señorial y con muchos elegantes detalles en el interior, ofrece una imagen deportiva y un comportamiento noble, gracias al motor Ecotec de 141 caballos.
Nacido de la plataforma global, denominada Delta II, de la que proceden otros modelos de la compañía como el Volt, el Buick Verano y algunos Opel europeos, lo primero por destacar es que se lo ve como un auto muy proporcionado, ofreciendo un largo total, de 4510 mm; un ancho, de 2067; un alto, de 1477, y una distancia entre ejes de 2685, lo que hace imaginar un interior bien dimensionado, ya que nos encontramos ante un hatchback compacto de muy buen tamaño, que lo acerca a los del segmento inmediatamente superior.
Mirándolo desde afuera, parece un auto mucho más grande, sensación que se amplía por la altura de la carrocería, que ofrece un capot en el que se resaltan las nervaduras que lo recorren a lo largo, un perfil sencillo, con líneas esculpidas, donde sobresalen las bellas llantas de aleación de 17", con diseño de cinco rayos, que calzan a la perfección.  En el sector posterior denota una total continuidad desde el techo, con un incipiente spoiler y los deflectores incorporados a la luneta, culminando en una tapa baúl que parece corta, algo lógico en un sedán compacto, pero que al abrirse revela un sector amplio, de 413 litros, que puede agrandarse, ya que ofrece la posibilidad de abatir los asientos posteriores, con lo que puede llegar alrededor de los 1000 litros.
Se puede criticar que no es muy profundo, pero, cabe destacar, que al abrir la tapa lisa, se devela la rueda de auxilio, de tamaño convencional, y los elementos del cambio.
En definitiva, nos encontramos con un auto de un muy logrado diseño exterior, con muy buenas proporciones y cierto aire a coupé, que tiene el privilegio de ser uno de los vehículos que pasea la cara de la marca y lo hace realmente muy bien, mezclando la elegancia con la deportividad.

Mecánica

En esta oportunidad nos tocó probar el motor naftero Ecotec de 4 cilindron con 16 válvulas de 1796 cm3, capaz de entregar una potencia máxima de 141 CV, con la estupenda caja automática de 6 velocidades, que está muy bien relacionada y que tiene una 6ta velocidad, que destaca como una clara sobremarcha, que sobresale en la ruta la llevar el motor totalmente relajado. Cabe aclarar que en esta caja se puede usar también con el comando manual secuencial, de inserciones sencillas.
Con este propulsor el auto se muestra ágil en todo momento, aunque un poco remolón en los primeros movimientos a bajas vueltas, pero seguro y cómodo en altas velocidades. El impulsor es uno de los mejores en relación cilindrada/potencia del segmento.
Durante las pruebas logramos un paso de 0 a 100 km/h en 11,7 segundos y una velocidad final de 194 km/h. Si bien no estamos ante el más modero de los motores de Chevrolet, podemos conseguir un consumo bastante ajustado, sin tener que estar cuidando demasiado. En ciudad este hatchback gastó 11,5 litros cada 100 km, mientras que en ruta, a 90 km/h, bajó a 7.2 l/100 km; a 130 km7h conseguimos una marca de 8,6 litros para recorrer los 100 kilómetros.
El consumo promedio, cercano a los 9,75 litros/100 kilómetros ofrece que, gracias al tanque de combustible, que carga 60 litros, se pueda circular más de 600 kilómetros sin tener que repostar.

Confort y equipo

En el interior del Cruze se destacan la sobriedad y la comodidad para todos los pasajeros, ya que, ofrece unas plazas delanteras muy amplias y cómodas, con todo tipo de regulaciones, realmente, difíciles de mejorar. Las traseras, tienen la misma amplitud que en el modelo sedán, es decir son espaciosas, anchas y bien proporcionadas para personas de menos de 1.85 de estatura. Si bien en este sector se distinguen tres plazas, que tienen cinturones de seguridad y apoyacabezas, en un viaje largo conviene poner un menor en el medio, ya que sería bastante incómoda para una persona de mayor altura. Los ángulos de apertura de las puertas son óptimos y facilitan el ingreso/egreso de todos los ocupantes al vehículo.
Puede aceptar distintos tipos de altura del conductor, ya que ofrece regulaciones tanto de las butacas como del volante (multifunsión), que puede modificar altura y profundidad.  Las terminaciones son muy buenas con encastres que no mostraron ni movimientos ni ruidos.
El tablero de instrumentos de lectura cómoda y rápida, es muy claro y completo y el equipamiento es realmente completo, con elementos de última generación, todos bien colocados, al alcance de la mano.
En el equipamiento de seguridad se pueden mencionar airbags frontales, laterales y de cortina, ABS con distribución electrónica de frenado, control de estabilidad y de tracción, cierre automático de puertas en velocidad, anclajes para silla de bebé ISOFIX, luces antiniebla delanteras y posteriores, sistema de alarma antirrobo y trabas para niños en puertas traseras.
En el sector del confort se destacan climatizador automático, cierre centralizado de puertas c/ comando a distancia, computadora de a bordo, espejo retrovisor electrocrómico, exteriores eléctricos y calefaccionados, levantavidrios eléctricos delanteros y traseros, sensores de estacionamiento traseros, sensor de lluvia, sistema de acceso y arranque sin llave, sistema de iluminación Follow me home, techo solar eléctrico, sistema de audio con Radio AM/FM, CD, MP3, AUX IN y puerto USB, entre otros componentes, que hace la vida en el interior muy confortable y segura.

Comportamiento

El comportamiento dinámico es realmente sobresaliente, todo esto gracias al muy buen trabajo de la suspensión, la delantera tipo Mc Pherson, y trasera, con barra de torsión. Esta muy buena configuración hace que siempre se lo sienta muy bien plantado, respondiendo, sin demoras y con eficiencia, a los mandos del conductor.
En las rectas no muestra ningún tipo de movimientos inesperados y en las curvas se lo nota muy efectivo a las velocidades permitidas. En las pruebas de autódromo, donde sobrepasamos el límite de 130, también se lo nota muy firme, con alguna tendencia al rodlido, sobre todo en las contracurvas, aunque se nota que se acomoda muy rápido y sigue con la trayectoria sin otro tipo de sacudidas. Cosas de la electrónica del auto, que hace que se acomode sin la intervención del conductor, algo que se agradece.
En ciudad absorbe todas las imprecisiones de las calles de nuestra imperfecta Buenos Aires y alrededores, con baches, lomos de burro, profundad cunetas y demás alteraciones, moviéndose seguro y sin mostrar conmociones.

Conclusión

En definitiva nos encontramos con un vehículo mediano que se destaca por el confort y la seguridad de todos los ocupantes. La garantía de 2 años sin límite de kilometraje, nos parece algo limitada, por lo que en este nivel tendría que tener, por lo menos, un año más. Los precios de las versiones de 5 puertas disponibles, arrancan en los  $ 135.034, para el nivel LT;  $ 150.024, para el LTZ, manual, y de $ 162.484, para la LTZ automático, que fue el que tuvimos oportunidad de probar, lo que nos parece que se adaptan perfectamente a los niveles que se manejan es este segmento.
Sin duda, el que adquiera un Chevrolet Cruze, estará conforme con lo que ofrece este familiar, tanto en el equipamiento como en el motor, con rasgos deportivos, pero, sobre todo por la riqueza de manejo y el desahogo que entrega en todo momento.