Varios lectores de diariodeautos.com.ar y oyentes de mi columna en el programa de radio El Exprimidor, así como el programa de TV Qm Autos, hacen varias preguntas referidas al cuidado de los vehículos durante los meses de calor, cuando nuestros vehículos está más expuesto a sufrir averías.
Por este motivo debemos prestar especial cuidado con él en verano, ya que el calor afecta el rendimiento del motor, haciéndolo perder potencia, los neumáticos y los frenos también pueden sufrir debido a las altas temperaturas.
El interior del vehículo no será el único que aprenda a la fuerza la parte negativa del verano, sino que su exterior también, ya que las extremas condiciones climatológicas a las que nos enfrentamos tendrán consecuencias sobre la carrocería del automóvil durante la época estival.
Por supuesto siempre hay formas de cuidar mejor al vehículo por lo que brindamos algunas sugerencias que ayudarán a sosegar las contrariedades que pueda sufrir el querido y, generalmente, poco cuidado vehículo en verano, proponiendo formad de actuar frente a cada una de las situaciones posibles.
Aire acondicionado, en buen estado. El circuito de aire acondicionado de tu vehículo es una de las partes más expuestas a sufrir una avería durante este verano, ya que normalmente se utiliza de verano en verano y el hecho de dejarlo de usar durante los meses invernales influye negativamente en su estado cuando lo queremos volver a usar al llegar el calor. Un repaso general al sistema o una carga de gas refrigerante deberían ser medidas suficientes para estar seguros de que el aire acondicionado de nuestro vehículo funcionará a la perfección durante toda la época estival. Igualmente, siempre es conveniente, aunque haga frío, como venimos diciendo, encender el AA, unos minutos durante el invierno, para que el sistema se mantenga activo y sin inconvenientes; si no lo hiciste, acordate de comenzar a hacerlo en los lejanos meses de frío.
Mantener la limpieza. Es esencial lavar el vehículo frecuentemente. Además, existe la posibilidad de utilizar cera con absorbente para rayos ultravioleta, que protegerá la pintura de los daños causados por el sol. Otras partes interiores de cuero o de vinilo también requerirán un mantenimiento especial para no envejecerse a causa de los rayos solares. Por otro lado, el calor también estropea las gomas de los limpiaparabrisas, efecto que se puede suavizar gracias a una limpieza adecuada y regular. Por supuesto, no es necesario llevar a que lo laven, en alrededor de 30 minutos, se puede hacer una buena limpieza de mantenimiento, ahorrando dinero y tiempo.
Proteger la carrocería del sol. En los días de más calor, es conveniente dejarlo estacionado, en lo posible, en interiores o a la sombra. Aunque no siempre se pueda, se debe intentar en la medida de lo posible, ya que la pintura de la carrocería se daña al permanecer durante horas bajo los rayos del sol. En caso de que no sea posible, siempre existe la posibilidad de cubrirlo con una lona para que sufra menos. Igualmente si se deja a la sombra de los árboles, ya que los pájaros, seguramente atacarán al indefenso vehículo realizando sus necesidades encima de él. La sugerencia es siempre llevar un trapo húmedo (se pude envolver en una bolsa y dejarlo bajo el asiento).
Revisar los neumáticos. Las altas temperaturas afectan el buen estado de los neumáticos, ya que si la presión está baja puede acortarla hasta un 15% más. Así que es esencial que siempre se revisen las presiones y muy recomendable que se haga cada quince días durante la temporada de más calor. Antes de realizar un trayecto de larga distancia, es fundamental hacerlo, ya que el desgaste en ruta, por las velocidades y el mayor calor, pueden desgastar una rueda mal inflada. Mirá el manual del usuario para ver cuál es la presión recomendada para tu vehículo, pero acordate, que si salís cargado a la ruta, esto afecta al inflado de los neumáticos.
Revisar Aceite. Es fundamental comprobar el tipo de aceite adecuado para el vehículo según lo indicado por el fabricante, algo que está indicado en el manual del vehículo. Si bien en la actualidad es bastante diferente el tiempo según el que manejemos, la antigüedad y el estado en general, la sugerencia es no llevar el mismo más de 30.000 km. Igualmente es necesario cada mes, por lo menos, darle una revisión, por ejemplo cuando se carga combustible, cuando el/la playero/a pregunta si miden el aceite.
Otros Líquidos. Además del aceite para motor hay varios líquidos que deben ser chequeados, por lo menos dos veces al mes para asegurar las condiciones del vehículo, como aceite para cajas de cambios o diferenciales; refrigerante o anticongelante, encargado de mantener la temperatura del motor; líquido de frenos y de dirección, vitales para la seguridad, ya que garantizan la presión correcta en el sistema hidráulico, y líquido del limpiaparabrisas, no olvidarse de llenar el depósito, ya que en la ruta se ensucia rápidamente y compromete la visibilidad.