Alfa Romeo viene desarrollando una muy minuciosa y luchada tarea en nuestro mercado, con autos que, en la mayoría de los modelos, están afectados por los impuestos que pone el gobierno a los vehículos premium.
Sin embargo, viene realizando una promoción de precios muy competitivos en nuestro mercado, sobre todo para el Giulietta, el compacto mediano del biscione, que tuvimos oportunidad de probar.
Este vehículo es el sucesor del Alfa 147 y heredero del nombre que la marca ya utilizó en algunos de los modelos en los años 50 y 70. Este nuevo Giulietta lleva tan sólo algunas de las piezas con los que comparte plataforma, Fiat Bravo y el Lancia Delta, y se presenta con una carrocería compacta y de cinco puertas, que es la única disponible.
Probamos el 1.4 Turbo 170 CV, que en nuestro mercado se sitúa como la gama intermedia, a un escalón por debajo del más potente, el Quadrifoglio Verde de 235 caballos, y por arriba del más económico, el 1.4 de 120 caballos.
Como todo auto italiano, el diseño sobresale notablemente, mostrando un vehículo bien compacto, de cinco puertas y cinco plazas, con un largo, de 4351 mm; un ancho, de 1798, un alto, de 1465, y una distancia entre ejes 2634, en el que se destacan los músculos laterales y detalles de gran estilo.
En el diseño estético el Giulietta tiene rasgos en común con el MiTo o con el 147 de cinco puertas. El frontal muestra un capot bien lanzado, surcado por dos nervaduras bien visibles, que van desde el parabrisas, cerrándose hasta llegar a la pequeña parrilla, de forma triangular, que comienza con el logo del dragón rampante, rodeado por cintas de aluminio, que le dan marco a la figura.
A los costados se encuentran los faros, de muy buena iluminación, con luz diurna LED, en los costados internos. Más abajo se ve una toma de aire más amplia, rodeada por las antiniebla redondas.
El perfil, con un aspecto de cuña, se muestra limpio y está cruzado, de punta a punta, por una nervadura que une las luces delanteras y posteriores; también, entregando un aspecto de cupé, sobresalen los tiradores de las puertas delanteras metálicos y cromados, y los de las puertas posteriores, que si bien se han situado en el vértice de la ventanilla para no romper la línea lateral, desentonan con el resto, ya que son de plástico negro y transmitan cierta sensación de fragilidad.
Lo que si se destaca son los pasarrueda musculosos, que guardan los neumáticos 205/55 R16 91V con las llantas de acero de 7.0/16 pulgadas, de muy buen diseño.
Atrás continúa el diseño con un alerón que sigue del techo y en el que se han colocado las luces del stop; se aprecian ópticas alargadas horizontales, con luces LED, que envuelven parte de la curvatura que va hacia el lateral. Abajo se nota el difusor sobre el que se incrusta la salida de escape.
Al abrir la puerta, se nota un baúl que ha mejorado respecto a su predecesor, aunque es acotado mostrando un piso plano, que arranca con una medida de 350 litros, pero que abatiendo los respaldos de los asientos posteriores puede llegar a los 1050 litros. Debajo del piso encontramos una rueda de auxilio temporal.
Sin duda, muestra un dibujo que es un aliciente extra para aquellos que busquen un compacto moderno de calidad y que se distingue del resto.
Motor
El motor probado es uno de los más aprovechados por el Grupo FCA, el 1.4 Multiair, que entrega 170 caballos con un torque, muy conveniente, de 250 Nm/2500 vueltas, que se muestra muy firme y con alta suficiencia para darle un carácter deportivo a este vehículo con un peso de 1365 kg.
Rápidamente notamos que empuja fuerte desde abajo, gracias a la tarea del turbo, que se hace cargo desde cerca de las 1700 rpm, y al sistema de apertura y cierre de válvulas variable, Multiair, controlado siempre por el sistema de modos de conducción Alfa DNA, que está en la consola central, y que se maneja con un tirador que nos permite seleccionar el modo de conducción.
En la computadora de a bordo aparecen las tres opciones disponibles Dynamic, Normal y All Weather, que a su vez son configurables para modificar el comportamiento de los sistemas de control de tracción, el tacto y la sensibilidad del acelerador y la dirección. Realmente espectacular, porque es notable la diferencia.
El modo Dynamic es el más adecuado para una conducción ágil y deportiva, mostrando una dirección que se vuelve más rígida, gracias a que cuenta con asistencia electrohidráulica, y el acelerador mucho más sensible.
El modo Dynamic activa el sistema Overboost del motor que aumenta el par temporalmente y en ciertas situaciones (cuando aceleramos a fondo) gracias al aumento temporal de la presión del turbo.
Con el selector en natural se tiene una conducción más eficiente en el consumo, y es especial para ponerla cuando nos manejamos por la ciudad, garantizando confort y mejor fluidez.
Por último, la modalidad All Weather es especial para los caminos mojados por condiciones de lluvia o con posibilidades de perder adherencia, alertando a todos los sistemas de seguridad activa, sin intervención del conductor. Realmente muy conveniente.
La caja de cambios automática de doble embrague TCT, de 6 velocidades muestra un funcionamiento muy bueno por el confort y por la suavidad con la que funciona.
Esta caja tiene varios modos de funcionamiento. Tres son automáticos y se activan en función de la posición del mando DNA. Otro es manual y permite elegir las marchas dando toques a la palanca del cambio.
Muestra muy buen comportamiento y aceleraciones, en la que logramos marcar 7,5 segundos para realizar las pruebas de 0 a 100 km/h.
En los consumos, vimos que durante nuestra prueba en la ciudad la marca ascendió a los 7,8 litros y en la combinada, en ruta, autopista y ciudad, logramos 6.5 litros/100 km de promedio. Teniendo en cuenta que el depósito de este modelo tiene una capacidad de 60 litros, estaríamos hablando de una autonomía superior a los 900 km.
Confort y equipamiento
Uno de los puntos en los que se aprecia mejor la calidad del Giulietta está en los buenos ajustes y el aislamiento acústico del habitáculo.
El interior muestra calidad en todos los aspectos de la fabricación, con materiales que se destacan por la excelencia, marcando el notable diseño de este auto.
Adelante, el acceso es muy simple, gracias a la amplitud de las puertas, mientras que atrás también podrán ingresar sin inconvenientes a las plazas, con puertas, que tienen amplitud suficiente, como para facilitar el pasaje.
En el sector delantero se notan buenos espacios disponibles, suficiente para conductores de estatura muy elevada. El puesto de conducción, en altura libre respecto al techo y anchura es realmente bueno en el segmento; es cómodo, aunque, cabe señalar, que es bien deportivo, con buena sujeción de las butacas, mostrando que es un vehículo enfocado al conductor.
El volante, multifunción, con controles para el audio, la computadora de abordo, el control crucero, tiene buen diseño y amplitud, puede regular en altura y profundidad.
Todos los mandos, sencillos e intuitivos, son fáciles de accionar, ya que están ubicados en una posición a la que se accede fácilmente y que evita retirar la vista del camino para accionarlos.
Atrás, los espacios no son para resaltar, ya que pueden viajar con comodidad dos ocupantes de hasta 1,80 m de altura. Es de los menos recomendables para llevar tres ocupantes, porque no sobra lugar en la anchura, ya que se lo nota bastante estrecho.
Uno de los buenos aspectos para resaltar es la cantidad de huecos que hay en el interior, con capacidad para colocar objetos de distintos tamaños.
En el equipamiento se destaca como un premium con sistema ABS, sistema de asistencia de frenado (BAR), control de tracción, control dinámico de estabilidad (VDC) con Hill Holder, diferencial electrónico Q2, airbags delanteros, laterales tipo cortina, apoyacabezas delanteros activos, sensor de lluvia y de temperatura exterior con sistema Start & Stop.
En el confort ofrece Blue & Me con media player, computadora de abordo, volante multifunción (radio y teléfono), equipo de audio con radio AM/FM con cd y mp3 y equipo de sonido HI FI con 6 parlantes, techo solar eléctrico, levantavidrios eléctricos delanteros con one-touch y traseros, espejo retrovisores exteriores eléctricos, climatizador automático bi-zona, sensor trasero de estacionamiento, butacas eléctricas calefaccionadas con memorias y tapizado de cuero Milano, entre una larga lista de componentes.
Comportamiento dinámico
Sin duda, este es otro sector para destacar. El Giulietta tiene una relación entre estabilidad y comodidad de suspensión de alta calidad, bien relacionada para un deportivo de estas características.
Adelante, es del Tipo McPherson, mientras que atrás, de paralelogramo deformable, ambos con resorte helicoidal y barra estabilizadora, que entrega confianza a quien lo conduce porque, incluso forzando la situación con el auto muy apoyado, la parte posterior no muestra movimientos bruscos.
Cuenta de serie con control de tracción y estabilidad, este último no es desconectable, pero no molesta porque no entra en funcionamiento si no es estrictamente necesario. En modo Dynamic automáticamente entra en funcionamiento el diferencial electrónico Q2. Cuando nos dispusimos a probarlo en tramos revirados y a ritmo ligero nos mostró que este diferencial se ajusta a la perfección para ser algo más permisivo a la hora de solucionar las pérdidas de tracción evitando que la rueda se frene en exceso y tratando de simular el funcionamiento de un diferencial autoblocante mecánico.
A la hora de negociar las curvas se nota una eficiencia deportiva de alta capacidad, con muy poco rolido, aunque se tomen curvas cerradas a alta velocidad. En las rectas va muy firme y apoyado en la dirección electrohidráulica, no decepciona ni a los más exigentes, por el buen tacto y lo directa que resulta.
Otra de las buenas características es que, aunque en nuestras pruebas tuvimos lluvias y manejamos exigiéndolo bastante y tanto los neumáticos como los frenos estaban muy calientes, notamos una muy buena capacidad de frenada, gracias al sistema de discos (ventilados delanteros), que detuvo al auto en distancias cortas.
Conclusión
Definitivamente el Alfa Romeo Giulietta es un deportivo que, además de llamar la atención de los que están alrededor, nunca pasa inadvertido, por el diseño y la solidez de la marca, sumamente reconocida en nuestro mercado.
El precio, de 53.700 dólares, se nota bastante salado por los impuestos que le agrega el gobierno actual a los vehículos importados, pero, está bien relacionado por lo que ofrece este vehículo, respecto de los rivales.
Sin duda, tiene las armas suficientes como para tentar a los compradores, por performances, por la calidad y por el espíritu que lleva el dragón rampante.
