Según la ley N° 5.294, recientemente promulgada por la legislatura del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, cuando un pasajero sea menor de 12 años y mida menos de 1.50 m deberá viajar con Sistema de Retención Infantil (SRI), correspondiente a la edad y altura, para garantizar la seguridad, lo que además es imprescindible, aún en trayectos cortos.
Esta modificación al Código de Tránsito y Transporte porteño indica que los SRI deberán estar homologados y respetar los requisitos establecido por las normas IRAM de Argentina, o las distintas normas internacionales. A su vez, en la normativa continúa vigente la prohibición de transportar bebés o niños en brazos en las butacas delanteras o posteriores, algo que se ve mucho en nuestras calles, pero que los responsables de regular el tránsito, parece que poco interés ponen para solucionarlo.
“La única manera de que un niño viaje seguro, es en una butaca o amoldador, ya que en caso de un accidente o frenada brusca, incluso a velocidad moderada, el peso del pequeño adquiere una fuerza de tracción tan elevada que los brazos de la persona que lo lleve, no bastarán para retenerlo. Por ejemplo, en un impacto a 60 km/h, la fuerza que produce un niño de aproximadamente 20 kg, al irse hacia delante es superior a los 300 kilos, esto significa que el impacto será de 17 veces su propio peso”, señalaron desde Chicco Argentina, durante la conferencia.
Lesiones
“Es importante entender que las butacas infantiles no son un simple accesorio para el auto, sino que puede significar la diferencia entre la vida y la muerte. Hoy en día, del total de las lesiones automovilísticas que sufren niños menores de 10 años, el 75%, ocurre en el tronco y cabeza, justamente las zonas que deben estar protegidas por la butaca”, indicó Gustavo Brambati, del CESVI Argentina
Ahora, el conductor del vehículo que traslade a menores de 12 años y con una altura menor a 1,50 metros, sin utilizar el dispositivo de retención infantil correspondiente, será sancionado con una multa de 100 unidades fijas (UF), lo que equivale a $2000, aproximadamente.
Con respecto a esto, Fernando Verdaguer, Asesor de la Comisión de Tránsito y Transporte de la Legislatura Porteña señaló que: “Durante lo que resta de 2015 y todo 2016 no van a haber multas. La lógica de la ley no es punir sino informar, concientizar y prevenir. Hay que hacer todo un proceso de comunicación para que la gente esté informada, por eso, los que infrinjan la norma, además de pagar la multa, deberán asistir a un curso de información”.
Selección
A la hora de seleccionar un sistema de retención infantil, hay que saber que éstos se clasifican en función de las medidas corporales del menor, siendo el peso el factor fundamental: El Grupo 0, que abarca bebés desde el nacimiento hasta los 10 kg; el Grupo 0+, es para niños con un peso menor a los 13 kg; el Grupo I, es para niños de entre 9 y 18 kg; Grupo II, para niños entre 15 y 25 kg, y el Grupo III, para niños con peso entre 22 y 36 kilos.
Para el Grupo 0 y 0+ es recomendable utilizar la butaca de seguridad colocada en la parte trasera del auto, en sentido contrario a la marcha. Para el Grupo I y II la butaca puede ir colocada en el mismo sentido a la marcha del automóvil. Y, para el Grupo III, se puede utilizar busters o butacas adaptables en altura y peso.
Requisitos
Especialistas de la Federación Internacional del Automóvil (FIA), a partir de un estudio realizado en el país, afirman que 4 de cada 10 sistemas de retención infantil no cuentan con todas las homologaciones requeridas por la ley. Por eso, cada butaca o buster debe llevar obligatoriamente una etiqueta certificada que se encuentra en la parte trasera o en la base de la butaca, y se reconoce gracias al color naranja.
La etiqueta, que debe estar perfectamente cosida o pegada al producto, indica el nombre del fabricante, la versión de la normativa de homologación del asiento y su correspondiente número de serie, la forma de instalación y grupo de peso.
En la Argentina, según un acuerdo firmado en junio de 2011, por el gobierno y los fabricantes e importadores de vehículos de nuestro mercado, a partir del año próximo (2016), todos los vehículos nuevos que se vendan en el país deberán contar con anclajes rígidos para la sujeción de asientos de seguridad infantil, en, al menos, una de las plazas traseras.
Tener en cuenta
Elegir la butaca o buster correspondiente a las medidas corporales. Asegurarse de que la butaca o buster esté homologado y cumpla con las normativas vigentes. Ver cuál es la posición adecuada de colocación del SRI siguiendo las pautas establecidas por la ley. Chequear que la butaca esté bien colocada y sujeta en el asiento trasero del auto. Una vez cumplidos los 5 años de uso, se recomienda reemplazar la butaca por una nueva, ya que se trata de un elemento expuesto a excesivo calor, frío y radiación UV.
Programa
La elección, instalación y correcto uso de los Sistemas de Retención Infantil (SRI) acordes a cada edad es fundamental para proteger la vida de los niños que viajan en automóvil. Con esta premisa, y en el marco de la ley Nª 5294, que exige la utilización de un SRI, debidamente homologado, para menores de 12 años o con una altura inferior a 1,50 metros, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, en conjunto con FIA Región IV y la revista “Ahora Mamá”, desarrollaron una capacitación dirigida al equipo de venta de principales tiendas especializadas de bebés y niños.
El aporte de los profesionales de FIA Región IV estuvo centrado en transmitir a más de 120 vendedores conocimientos y capacidades teórico-prácticas con el objetivo de lograr un criterio unificado para informar a los adultos sobre los beneficios de trasladar a los niños de forma segura.
A través de esta iniciativa, en la cual también participaron especialistas de seguridad vial del Automóvil Club Argentino (ACA), los comercios cuentan con personal capacitado y entrenado para asesorar a padres en todos los aspectos por contemplar para la adecuada selección e instalación de los denominados comúnmente ¨huevitos¨ y sillitas¨.
El próximo paso será ampliar este programa a nivel nacional compartiendo el conocimiento técnico en distintas provincias de nuestro país.
“Teniendo en cuenta los resultados del último estudio que realizamos, el cual arrojó que sólo 2 de cada 10 menores viajan de forma segura, creemos que es esencial trabajar en estas acciones para que los padres entiendan que el uso de los Sistemas de Retención Infantil no sólo tiene como finalidad cumplir con un requisito legal, si no que la correcta utilización reduce hasta un 75% las lesiones graves y las posibilidades de perder la vida. Por todo esto, día a día trabajamos en concientizar a los padres transmitiendo nuestro conocimiento y destacando la importancia de la selección adecuada según peso y altura del niño, como también su correcta instalación dentro del vehículo”, resaltó Leandro Perillo, Gerente de Movilidad y Políticas Públicas de FIA Región IV.
Formación teórica
Entre los ítems que fueron incluidos en la formación teórica se destacan:
· Consecuencias del no uso y del uso incorrecto de los SRI.
· La importancia en la elección del grupo de SRI teniendo en cuenta el desarrollo del niño y las características del vehículo.
· Que el SRI posea una homologación internacional.
· Los diferentes tipos de cinturones de seguridad y sistemas de anclajes o sujeción (Isofix o Latch), tanto de los SRI como del vehículo, y los cuidados a tener en cuenta por los Airbag.
· Identificar en los manuales de usuario, tanto de los vehículos como de los SRI, los pasos correctos para la instalación, las características del vehículo de las señales de advertencia a tener en cuenta.
· Orientación del SRI (mirando hacia adelante o hacia atrás) y el porqué de estas posiciones, haciendo hincapié en la recomendación de llevar mirando hacia atrás el mayor tiempo posible (mínimo 2 años, aunque prácticas internacionales recomiendan hasta los 4 años).
· La mejor ubicación para colocar del SRI dentro habitáculo. En este caso, se explicó que por ley (nacional), los menores de 10 años deben ir en las plazas traseras con el SRI.
· Puntos a tener en cuenta para sujetar al niño a la sillita.
· Explicación y demostración de los errores más comunes de instalación.
· Como cierre, los asistentes rindieron un examen debiendo identificar distintos escenarios con errores o malos hábitos de instalación o sujeción, basados en los conocimientos recibidos en la capacitación.
“Estamos muy motivados por la capacitación que dictamos a la fuerza de venta de locales que comercializan sillas de retención infantil, y por el nivel de interés y preocupación que han demostrado los participantes durante todas las jornadas. Consideramos de vital importancia que las tiendas cuenten con personal preparado para asesorar con conocimientos técnicos a los consumidores en la elección de la mejor silla acorde a las etapas del niño y al vehículo”, expresó Pablo Azorin, Jefe de Seguridad Vial y Medio Ambiente de FIA Región IV.